miércoles, 21 de septiembre de 2016

Vendrá la muerte y tendrá tus ojos. Cesare Pavese

 
 


Vendrá la muerte y tendrá tus ojos
Cesare Pavese
Mondadori, 1998
 
 
El poeta, ensayista y novelista italiano Cesare Pavese (1908-1950) es uno de los más grandes e influyentes literatos del siglo XX. Su más bello y escalofriante poema es "Vendrá la muerte y tendrá tus ojos", inspirado por Constance Dowling, una actriz de cine norteamericana con la que vivió una tormentosa relación, perteneciente a su segundo libro de poemas de título homónimo, editado póstumamente en 1951, y reeditado por Mondadori en 1998.
 
En poesía lo único que publicó en vida es Trabajar cansa (Lavorare stanca, 1936), colección de poemas que, por su carácter predominantemente narrativo, se oponía a la tradición hermética de Giuseppe Ungaretti, Eugenio Montale y Salvatore Quasimodo. Con este título el autor no aludía al trabajo físico, sino al trabajo del alma, se trata, pues, de un cansancio metafísico, espiritual.
 
Un malestar existencial que unido al desengaño amoroso sufrido con Constance Dowling motivaron su suicidio en un hotel de Turín. Estos fueron sus últimos versos:


Vendrá la muerte y tendrá tus ojos-
esta muerte que nos acompaña
desde el alba a la noche, insomne,
sorda, como un viejo remordimiento
o un absurdo defecto. Tus ojos
serán una palabra inútil,
un grito callado, un silencio.
Así los ves cada mañana
cuando sola te inclinas
ante el espejo. Oh, cara esperanza,
aquel día sabremos, también,
que eres la vida y eres la nada.
Para todos tiene la muerte una mirada.
Vendrá la muerte y tendrá tus ojos.
Será como dejar un vicio,
como ver en el espejo
asomar un rostro muerto,
como escuchar un labio ya cerrado.
Mudos, descenderemos al abismo.


(Traducción de José Agustín Goytisolo)


Reproduzco a continuación los versos en el idioma en que originalmente fueron escritos, en la lengua de Dante, para que se pueda apreciar en toda su magnitud la extrema belleza de este canto delirante, exaltado y apasionado, con ese verso magnífico, enloquecido e inquietante que lo encabeza:


Verrà la morte e avrà i tuoi occhi-
questa morte che ci accompagna
dal mattino alla sera, insonne,
sorda, come un vecchio rimorso
o un vizio assurdo. I tuoi occhi
saranno una vana parola,
un grido taciuto, un silenzio.
Cosí li vedi ogni mattina
quando su te sola ti pieghi
nello specchio. O cara esperanza,
quel giorno sapremo anche noi
che sei la vita e sei il nulla.
Per tutti la morte ha uno sguardo.
Verrà la morte e avrà i tuoi occhi.
Sarà come smettere un vizio,
come vedere nello specchio
riemergere un viso morto,
come ascoltare un labbro chiuso.
Scenderemo nel gorgo muti.
 
 


Algunas de las mejores y más conmovedoras páginas de Pavese se encuentran en su diario íntimo, que fue publicado en 1952 bajo el título El oficio de vivir (Il mestiere di vivere). Repleto de pasajes deslumbrantes con los cuales me identifico como "Queda al tiempo claro que el sentido de tu vida no puede ser sino la construcción" o "Se necesita humildad, no orgullo", esta obra es la historia de una desesperación y la lucha contra esa desesperación, la angustia de un hombre que se enfrenta desolado y desnudo al vacío existencial y como consecuencia sufre una crisis de autoconocimiento que conduce irremediablemente a la muerte del escritor. Un lúcido retrato de la soledad del artista, abocado a una secreta incomprensión y al indefectible anonadamiento que provoca el vértigo de la nada.
 
 
 
Gregorio Muelas Bermúdez





No hay comentarios:

Publicar un comentario